Desde antes que aprendamos a leer y escribir, entramos en lo que llamamos escuela (yo ya sabía)... y comienza el proceso de educación, año tras año vamos teniendo distintos maestros (otros los quieren tanto que los tienen años seguidos)...
La palabra maestro esta desvalorizada igual que otras, como la palabra amigo.
Entonces queda en boca de todos, refiriéndose a cualquier chichipio el termino maestro.
Pero hay maestros que están fuera de la escuela, que nos enseñan cosas mucho mas importante que saber que el la suma del cuadrado de los catetos es igual al cuadrado de la hipotenusa.
Nos enseñan sobre temas relevantes, sin tener que repetir las cosas hasta que se queden grabadas. Lo hacen de una manera mucho mas sutil, casi sin querer hacerlo, y muchas veces no lo quieren hacer.
Esos maestros nos dan disparadores sobre muy diversos temas, haciendo que nuestra psiquis comience a funcionar, casi pudiendo ver los engranajes, al mejor estilo de Tiempos Modernos.
Con estos maestros se pueden mantener charlas sobre temas triviales, y no tanto, durante horas.
Son personas que uno no se cansa de escucharlos, siempre tiene algo nuevo que decir, nos nutren, nos llenan, nos complementan.
En mi caso tango muchos maestros, uno es el Mago Maguito, que fue mi primer maestro en magia hace muchos años atrá y después se transformo en un chaman, otro es Christian Pedrito, compañero de recitales, y filosofo por naturaleza, y por último y no menos importante es Monchito, que es uno de mis maestros mas reciente, que aguardo ansiosmente cada encuentro para discutir, debatir, refutar, hipotetizar y tomar mate.
ay, me voy a poner colorado. Gracias Ale. A veces las personas se miden en los logros, en los premios que ganan, es sus reconocimientos. A mi me alegra trascender en la vida de mis amigos.
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