Lenguaje, su degradación

Dicen que escribimos como hablamos, y es una pena, ya que hemos defenestrado nuestro hermoso lenguaje.
Incorporamos a nuestra lengua popular, muchos neologismos, es decir no tan académicamente, palabras que surgen a medida de nuevas generaciones.
No es un proceso nuevo, el de incorporar nuevas palabras a nuestro diccionario, del cruce de culturas surgen nuevos términos como los conventillos del barrio de La Boca, en donde grupos de europeos de distintas nacionalidades mezclaron sus costumbres, creencias, lenguajes y se formo nuestro lunfardo.
Hay situaciones en las que dan ganas de agarrar un Laurosse Ilustrado, y partírselo por la cabeza a las personas, muchas veces comunicadores con renombre, políticos, y otras personas que uno se cruza en su vida, que ensucian nuestro lenguaje..
Hoy todo el mundo te dice "amigo", si buscamos una definición enciclopédica de esa palabra podemos encontrar: "Que tiene amistad: persona amiga" (sic), pero, por qué te dicen amigo, no soy tu amigo. Así se pueden citar un montón de terminos parecidos, cuando algo es piola... ¿Qué es, una soga?
Cabe resaltar, que la mayoría de la población argentina, tiene (mos) incorporado el vulgarismo boludo (o bolo´o, dependiendo de la zona geográfica) es una palabra habitué en nuestro castellano, que ya no es castellano propiamente dicho, es argentino, de los más de 2800 idiomas y más de 3000 dialectos que hay en el mundo tenemos este, que lo vamos mutando, transformando.
El genial, Fontanarrosa, en una de sus últimas presentaciones en público dejo que no es lo mismo decir que una persona es un sonso, a que es un PELOTUDO, hay veces en que hay que recurrir a dialectos, para que se entienda.
Es lógico que el lenguaje, sea un híbrido, que mute, pero no abusemos de él.
No es tan difícil, hablar bien no cuesta un carajo, y reporta un beneficio de la puta madre.